Historia de la termodinámica

La historia de la termodinámica se remonta a principios del siglo XIX, cuando los científicos empezaron a investigar de forma más sistemática las relaciones entre calor, trabajo y energía.

En 1824, el ingeniero francés Sadi Carnot publicó un tratado sobre la teoría de las máquinas térmicas, en el que describía los principios de la termodinámica y sentaba las bases para el estudio de la transferencia de calor y el comportamiento de los gases.

En las décadas siguientes, otros científicos, entre ellos James Joule y Lord Kelvin, hicieron importantes aportaciones al desarrollo de la termodinámica. En el siglo XX, los principios de la termodinámica se aplicaron a una amplia gama de campos, como la biología, la química y la ingeniería.

Hoy en día, la termodinámica es una piedra angular de la ciencia y la tecnología modernas, con aplicaciones en ámbitos que van desde la generación de energía hasta la refrigeración y el aire acondicionado.